PACHUCA DE SOTO, 08 NOV/News Hidalgo/.- Como parte de las actividades de la 17 Semana del Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades (ICSHu), de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), se realizó de manera virtual la presentación del libro Turismo Cultural, un estudio comparativo de los pueblos mágicos hidalguenses.
En el evento, Jesús Enciso González, profesor investigador del Área Académica de Antropología e Historia y autor de un capítulo del libro, compartió el origen de la investigación.
Mencionó que al realizar la investigación sobre los pueblos mágicos hidalguenses notó que el programa a nivel nacional inició en Hidalgo. “En Huasca comencé una investigación, tanto documental como de campo, y me percaté que los pueblos mágicos hidalguenses encerraban una historia muy interesante. El contexto de estos estudios siempre fue de antropología, pero un pueblo mágico va más allá, se amarra con fenómenos de orden económico, sociológico e incluso psicológico”.
Asimismo, mostró su postura referente a la definición de lo que es el turismo cultural: “viaje, identidad y autonomía son tres categorías de lo antropológico y que el turismo ha tomado como elementos fundamentales para echar a andar los pueblos mágicos. El turismo cultural tiene la capacidad de convertir al turista en viajero, aquel que se queda en los espacios y vive la cultura de la zona”, añadió.
De igual manera, habló sobre cómo es que repercute el entorno turístico en los habitantes de los diferentes pueblos mágicos. “Prácticamente lo que hacemos es justificar la vida cotidiana, yo puedo ir a Real del Monte o Huasca y lo que voy a esperar es que la gente que vive ahí me acepte como turista, sea siempre hospitalaria conmigo. Al final esto puede generar hartazgo, no solo en quienes viven en los pueblos mágicos, sino en cualquier otra ciudad que sirve de destino turístico, pero los habitantes comprenden que resulta una derrama económica fundamental para las ciudades y eso los obliga a comportarse amables”.
En cuanto a la homogeneidad cultural, señaló que “los gobiernos, tratando de impulsar el turismo, impulsan políticas públicas y estrategias de desarrollo regional que tienden a buscar los mismos niveles de calidad y crecimiento. La globalización ha querido desaparecer estas desigualdades regionales, pero no lo ha logrado”.
Además, al abordar la obra Magia social de Pierre Bordeau en relación a lo que pasa con los pueblos mágicos, declaró que “esto es un fenómeno de mercado en el cual, el consumidor de manera subjetiva acepta que tal producto vale como una eficacia simbólica, es decir, creemos en él, creemos que es bueno, aunque no lo sea”.
Al cerrar la presentación editorial, el investigador externó: “Nosotros tenemos que creer que los pueblos son mágicos. El pueblo mágico es codiciado y deseado por las poblaciones ante la falta de atención del estado. Finalmente, recalcar que se ha detenido el apoyo destinado a pueblos mágicos, sumado a la pandemia, habrá que ver si el pueblo mágico como maca realmente funciona, o todo este tiempo fue solo su dependencia al presupuesto federal”.
