Explica especialista UAEH la importancia de fijarse metas individuales
PACHUCA DE SOTO, 04 ENE/NEWS HIDALGO/.- “No es cuestión de vida o muerte, pero sí es importante tener metas individuales, sobre todo cuando estamos acercándonos a iniciar el año”, declaró en entrevista Rebeca Guzmán Saldaña, profesora investigadora del Área Académica de Psicología de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), con relación a la importancia y el impacto a nivel psicológico que tiene establecer propósitos cada que inicia un nuevo año.
De acuerdo a lo expresado por la experta, las metas individuales se relacionan, por ejemplo, con el crecimiento profesional o el socioeconómico; sin embargo, también hay metas que tiene que ver con lo inmaterial, como la paz espiritual, la felicidad, el amor o los cuidados hacia los demás.
De igual manera existen las metas colectivas, que corresponden al cumplimiento de estas mismas desde grupos como la familia (cambio de residencia, ajustes en las rutinas compartidas); o desde los grupos laborales, en los que se persiguen metas comunes para alcanzar lo planteado a nivel administrativo como los planes anuales de trabajo, por ejemplo.
La también jefa del Área Académica de Psicología afirmó que sí es importante generar propósitos, pues impacta de manera relevante a la mente al permitir la visualización de esas metas para después determinar una ruta a seguir.
Si bien no existe una receta específica a seguir para cumplir los propósitos, algunos aspectos que se deben considerar para llevarlos a cabo son los siguientes: sentar objetivos realistas y viables; pensar en metas cortas que se logren y que haya más posibilidad de cumplir (dar pasos cortos); así como tomar en cuenta los detalles al momento de planificar (abordar un plan detallado desde el primer día que queramos llevar a cabo la meta).
La fuerza de voluntad, definida por la doctora Rebeca como “la energía que surge dentro de cada persona para cumplir sus metas”, hace referencia a una serie de capacidades que los psicólogos denominan “capacidad de autocontrol, tolerancia a la frustración, capacidad de autoevaluación”, basado en la capacidad de aprendizaje, en un conjunto de habilidades que se integran a los hábitos y al sentido de vida de cada persona, a la vez que favorecen la predisposición y facilidad para lograr las metas.
Esta misma parte de un estilo de vida y tiene que ver con un trabajo personal de entrenamiento y de potencial, pero no es una receta, sino que tiene que ver con la regulación emocional, definida por la experta como “la capacidad que se tiene para regular y saber manejar las emociones”.
“Percatarnos del más mínimo éxito es vital durante el proceso de realización de los propósitos, ya que se adquieren estímulos adecuados”, expresó la experta al finalizar, de allí la relevancia de determinar propósitos y metas a alcanzar, pues continuamente existe un factor de motivación y ánimo en las personas.