PACHUCA DE SOTO, 25 ABR/NEWS HIDALGO/.- El fotoperiodista mexicano Augusto Vázquez presentó en la Sala “Doctor J. Pilar Licona Olvera” de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) la obra editorial El Salvador, huellas de la conciencia, esto como parte de las actividades del Festival Internacional de la Imagen (FINI) 2023.
Al exponer su obra ante un nutrido público, Augusto Vázquez comentó que su libro no ha dejado de sorprenderle, pues “en todas las presentaciones me encuentro con gente que apoyó a salvadoreños y me doy cuenta de cómo fue tan impactante y tan fuerte la capacidad que tuvo ese proceso para generar esa dinámica de solidaridad a nivel mundial.
Añadió que tener esos espacios de solidaridad en todo el mundo debían ser alimentados con información adecuada, por lo que la idea del libro que presentó en el FINI es mostrar las fotografías para que lleguen a todos esos lugares donde enviaron apoyo.
“Estando en los frentes de guerra, tomaba las fotos y entregaba el rollo a los compañeros; nunca más me enteraba lo que pasaba con las fotos. Las fotos circularon a lo largo del mundo, como 'La Piedad' que es el caso más emblemático, pero creo que cumplieron con el objetivo que se tenía, que era representar la lucha del pueblo salvadoreño en su
contexto interno desde un discurso informativo, pero desde dentro de una guerrilla, no solo una interpretación
externa.
Por su parte Daniel Vargas Serna, moderador de la ponencia, mencionó que la obra de Augusto Vázquez más allá que un libro, es una serie de experiencias, emociones y de un compartir de una forma de vida extraordinaria del maestro Vázquez.
Por otro lado, la comentarista María Ignacia Ortiz dijo: Realmente ha sido una celebración tener en mis manos este ejemplar, resultado de un proyecto autogestivo. Indicó que un primer tiraje se presentó en el Museo Archivo de la Fotografía a finales del 2021 en la Ciudad de México y puntualizó que la portada es una conmovedora fotografía de un guerrillero caído en combate en marzo de 1982, quien es sostenido por su compañero de lucha, justo antes de su último aliento.
Esta fotografía se conoció en varios medios de comunicación y fue nombrada por el público como La piedad, ya que evoca a la escultura en mármol blanco del artista italiano Miguel Ángel. Las expresiones en el rostro de los jóvenes guerrilleros son emotivas. Dolor y lamento. El cuerpo rendido del combatiente es rodeado por los brazos de su
compañero en el momento que ofrende a su vida a la lucha revolucionaria, manifestó.
Por su parte, el comentarista Tonatiuh Herrera destacó el trabajo fotográfico del autor y aseguró: “Las fotografías que ustedes ven han pasado por varios filtros, primero el de alguien que se comprometió, que fue a Nicaragua, luego a El Salvador y luego al frente de guerra.
Augusto tuvo que sobrevivir a la guerra, pudo tomar fotos; sus fotos pudieron llegar a un lugar donde pudieron ser impresas y las ha ido recopilado con el tiempo. Esto habla de la calidad de su fotografía, enfatizó y mencionó: Ahora tenemos que todo mundo es fotógrafo y nadie lo es, puede haber un millón de fotos y ninguna habla de lo verdaderamente importante para la sociedad, por eso lo valioso de Augusto es que intenta retratar lo que está viendo.
